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Santa Ana,la abuela de todos: «Mater Matris Dei»

 Hace unas semanas, escribí en el muro de facebook que pronto se retomarían las publicaciones enmeditaenpaz, y así lo hago. Con un personaje muy especial como Santa Ana. Una santa que quizá está un poco olvidada pero que su papel no se limita al de madre de María sino al de abuela de Jesús y de echo, abuela e toos nosotros.

Santa Ana, la madre de María, la abuela de Jesús… En el pueblo en el que vivo, hay una especial devoción a Santa Ana, incluso tiene una ermita y una estatua que sacan en procesión mínimo una vez al año. Ademàs, por estas fechas y durante una semana la convierten en Alcaldesa del pueblo. Por medio de una ceremonia delante del Ayuntamiento, junto al párroco, el Alcalde hace entrega del bastón de mando a Santa Ana.

Ojeando un poco la historia, parece ser que la Iglesia de Oriente ya veneraba a Santa Ana desde el s.IV. De echo, fue a raíz de la llamada “Leyenda Dorada” que se instituyó su fiesta el 26 de julio. La istoria o leyenda “ dio paso a una de las representaciones pictóricas vinculadas con la Concepción de María. Es así como nuestro Dios, tenía reservado un papel especial para San Joaquín y Santa Ana: Sigue leyendo

Cuidemos la familia, ¡no lo olviden!

parejaUno con una y para toda la vida.

A pesar de las leyes inicuas que se aprueban desde los gobiernos anticristianos, el matrimonio siempre seguirá siendo de uno con una y para toda la vida. Repito, de ¡UNO CON UNA!

El esposo y la esposa deberán vivir unidos en santo matrimonio, porque así lo exige la crianza de los hijos, que necesitarán una sociedad estable para crecer y desarrollarse, y eso se lo proporciona el matrimonio católico.

Satanás odia todo, pero en especial odia al matrimonio católico, porque es un semillero de santos y fermento de santidad en la sociedad. Por algo es que se empeña en atacar en primer lugar al matrimonio, porque bien sabe que destruyéndolo, o al menos desvirtuándolo, la sociedad se precipita en un caos que arrollará a la entera humanidad en el abismo infernal.

Para ser buenos esposos, primero hay que haber sido buenos novios; y para ser buenos novios, se debe haber sido buen cristiano, acostumbrado al espíritu de sacrificio y renuncia, sabiendo que no podemos ir por la vida dándonos todos los gustos y haciendo nuestro capricho, sino que debemos saber que el verdadero amor consiste en hacer feliz al ser amado, empezando por hacer feliz a Dios mismo, cumpliendo sus deseos y contentándole en todo, y luego también hacer feliz a los seres que amamos. Sigue leyendo

La Sagrada Familia: un regalo para toda las familia (por Ghislain Roy, sacerdote)

La Sagrada FamiliaLa presencia de Jesús, María y José inspira a cada familia en la forma de vivir y de amar. Los padres y los jóvenes están descubriendo los Sagrados dones espirituales de la familia que Dios quiere dar a cada familia. Seamos iluminados por su ejemplo.

María y José, a pesar de sus dificultades mantuvieron la fe en Dios. María, por la gracia de Dios, estaba embarazada antes del matrimonio. A pesar de la sentencia, lo puso en las manos de Dios. Nuestra familia o uno de sus miembros, no es considerado y es rechazado por los demás. Ofrezcamos esta lesión por las manos de María al Padre. Sigue leyendo

¿Por qué Dios no arregla todo?

Dios y el mundo 2¿Podría Dios arreglar absolutamente todo? Sí, podría, porque Él todo lo puede. Pero no entra en su Providencia el hacerlo, pues Él quiere que nosotros los hombres tengamos una semejanza con Él: el ser misericordiosos y compasivos.

Si en el mundo no existieran males y miserias, los hombres no tendríamos manera de practicar la misericordia, la hospitalidad, la caridad. Entonces es que Dios permite los males pero para que los hombres nos comprometamos a ayudar a los hermanos de todas las formas que sugiere el amor.

¡Ay de nosotros si somos duros y no nos compadecemos del prójimo que sufre! Porque los sufrimientos de los demás, son un tesoro que nos está esperando para que lo hagamos nuestro, por medio de la ayuda y de la caridad. Dios puede arreglar todo, pero no lo hace, sino que nos deja una parte de ese arreglo en nuestras manos. ¿Y no creamos que no nos pedirá cuenta de ello? Porque si permite el mal, es para que nosotros nos hagamos buenos ayudando a todos. Sigue leyendo